El llamado caso de la “secta rusa” en San Carlos de Bariloche —que se investiga desde marzo de 2025— volvió a generar repercusión pública luego de que Elena Makarova enviara una carta abierta al presidente Javier Milei. La mujer, ciudadana rusa y madre de un niño nacido en Argentina, solicitó al mandatario una revisión del expediente y una investigación independiente sobre el accionar de la fiscalía.
El llamado caso de la “secta rusa” en San Carlos de Bariloche se arrastra desde marzo de 2025, cuando las autoridades argentinas detuvieron a 21 ciudadanos rusos acusados de integrar una red de trata de personas. Desde entonces, las audiencias judiciales permanecen sin avances y los imputados continúan privados de libertad.
En su carta, Makarova acusa a la fiscalía de haber “fabricado” la causa y de cometer violaciones sistemáticas de los derechos humanos. “Le pido al señor Presidente que garantice que Argentina siga siendo un país de justicia y no de miedo e impunidad”, expresó. El documento también lleva la firma de los abogados Dr. David Malnero y Dr. Carlos Tomás Beldi.
La denunciante relató que su experiencia en el Hospital San Carlos de Bariloche fue “una verdadera pesadilla”. Según su testimonio, tras el parto fue aislada, se le retiraron sus documentos y teléfono, y su hijo recién nacido recibió cuatro vacunas en un mismo día sin supervisión médica, lo que —asegura— provocó complicaciones graves en su salud.
Makarova acusa además al asistente del fiscal Tomás Labal y a otros funcionarios judiciales y hospitalarios —entre ellos Gustavo Revoru, Rodrigo Treviranus y Oscar Fernando Arrigo— de haber “fabricado la historia de la red de trata” e impedido que presentara su declaración, en supuesta violación del Código Procesal Penal.
La Fiscalía de Bariloche niega haber manipulado el caso, aunque la defensa sostiene que existen pruebas ocultas. En un artículo publicado el 2 de noviembre de 2025, la periodista Samira Álvarez también señaló presuntas irregularidades en la instrucción del expediente y el trato a los detenidos.
En su carta, Makarova llama la atención sobre la situación de los 21 ciudadanos rusos detenidos, quienes llevan más de siete meses privados de libertad sin cargos formales. Entre ellos se encuentra Konstantin Rudnev, de 58 años, recluido en una prisión de máxima seguridad y aquejado de una enfermedad pulmonar crónica que, según informes médicos recientes, requiere un traslado urgente a un hospital especializado.
Los demás detenidos, indica, carecen de documentos y medios de subsistencia, sin acceso pleno a la defensa ni resoluciones judiciales sobre su situación. “Les pido que no cierren los ojos ante lo que está ocurriendo. Estas personas necesitan justicia y humanidad”, señala Makarova en el documento.
Entre las peticiones principales al presidente Milei, la carta solicita una investigación independiente sobre la fiscalía y el hospital, la liberación de las 21 personas detenidas y el cierre de la causa penal por falta de pruebas.
Copias del documento fueron enviadas a la Embajada de la Federación Rusa, al Ministerio de Justicia y a organizaciones internacionales como Human Rights Watch, Amnesty International, la OEA y el ACNUDH de Naciones Unidas.
El texto de Makarova marca un nuevo capítulo en un expediente que lleva siete meses sin avances visibles, mientras crece la expectativa por la posible respuesta del presidente Milei y de los organismos internacionales de derechos humanos.
El medio continuará informando sobre la evolución del caso y los pronunciamientos oficiales que surjan en torno a la llamada “secta rusa de Bariloche”.