En una publicación en Facebook, Viviana Germanier, ex intendenta de Catriel, denunció que fue confrontada por la actual intendenta, Daniela Salzotto, mientras visitaba el Tribunal de Cuentas. Germanier relató que, al encontrarse con Salzotto y su comitiva, fue cuestionada sobre su presencia en el lugar. Germanier sostuvo que, como ciudadana, tiene derecho a circular libremente y a acceder a la documentación necesaria para su defensa en un proceso judicial en curso. Además, afirmó que lo ocurrido es un indicio de persecución política en la ciudad.
En respuesta, la intendenta Daniela Salzotto criticó públicamente a Germanier, cuestionando su frecuente presencia en dependencias municipales a pesar de estar denunciada por delitos contra la administración pública. Salzotto expresó su preocupación por el impacto que la situación judicial de Germanier podría tener en los empleados municipales, especialmente aquellos en roles sensibles. La intendenta instó a Germanier a cesar lo que consideró actos de persecución, destacando los problemas administrativos heredados de su gestión. Este conflicto se enmarca en una serie de enfrentamientos, incluyendo la dilatada transición de poder que Salzotto reclamó desde abril hasta octubre del año pasado.
Como antecedente relevante, a comienzos de 2024, la intendenta Salzotto presentó una denuncia penal en la fiscalía de Cipolletti por posibles irregularidades en la licitación pública 01/23 relacionada con obras de pavimentación en B° Preiss. En mayo, una auditoría entre el gobierno provincial y el municipio derivó en una nueva denuncia contra exfuncionarios de la gestión de Germanier, señalando la desaparición de maquinaria por más de 10 millones de pesos en el área de Cultura. Salzotto utilizó las redes sociales para informar sobre estas irregularidades y confirmó que presentó otra denuncia penal por “retención indebida” de estas herramientas. El proceso de transición entre Germanier y Salzotto fue muy convulsionado, con varios cruces mediáticos a lo que se sumaron acusaciones de falta de orden y transparencia en el traspaso de gestión. En diciembre, una vez que asumió, Salzotto aseguró que la administración de Germanier dejó alrededor de 500 millones de pesos en deudas.
El enfrentamiento entre la intendenta y la ex intendenta también parece tener otra arista que se produce puertas adentro del municipio local. A principios de este mes, el Ejecutivo municipal emitió un preaviso de finalización de contrato para varios empleados municipales bajo la modalidad de contratados, lo que fue interpretado por algunos como despidos o desvinculaciones. Desde el Ejecutivo afirmaron que se trata de 10 casos que están siendo analizados debido a un historial recurrente de ausentismo y licencias médicas que está bajo sospecha. Parte de estos empleados son exfuncionarios del gobierno de Germanier, según confirmaron fuentes del Ejecutivo a VientoSur Noticias.