La Banca del Pueblo quedó finalmente definida el domingo 7 de diciembre, cuando Analía Coronado, titular del barrio Lote 6, fue electa como nueva representante para el período 2026. La designación llegó tras varios días de incertidumbre institucional, tensiones entre presidentes de juntas barriales y reclamos públicos para que se cumpliera el procedimiento previsto en la normativa local.

La falta de votación en la reunión del 2 de diciembre del Consejo Vecinal —instancia en la que ya estaba presentada la candidatura de Coronado— abrió un escenario de conflicto. Ese encuentro estuvo atravesado por cruces verbales, participación de concejales y acusaciones entre representantes institucionales que incluso se filmaron con teléfonos celulares, según describieron participantes de la jornada. La ausencia de definición motivó una serie de presentaciones formales de la oposición y activó la intervención institucional del Concejo Deliberante.

Reclamos opositores y advertencias por la fecha límite

El 4 de diciembre, las concejalas Elizabeth Cofré (Primero Río Negro) y Juana Cárdenas (JSRN) ingresaron notas al Consejo Vecinal y al Concejo Deliberante solicitando que se convoque a votar antes del 12 de diciembre, fecha límite que establecen los plazos de la Carta Orgánica para completar la integración del cuerpo legislativo. Ambas insistieron en que la Banca del Pueblo debe renovarse anualmente entre presidentes barriales en funciones y que la normativa vigente —las ordenanzas 113/19 y 170/20— no contempla la posibilidad de dejar el cargo vacante.

Las edilas también señalaron que cualquier designación que no surgiera de una votación válida entre los presidentes habilitados carecería de legitimidad. Además, objetaron el uso de inasistencias como argumento para frenar postulaciones, recordando que esas situaciones solo pueden ser consideradas mediante un acto formal del Concejo Deliberante y que la representación barrial puede ser ejercida por los vicepresidentes en casos justificados.

Consultada por la situación, la entonces titular de la Banca del Pueblo, María Molina, evitó definiciones en ese momento y solo indicó que “en estos días habrá novedades”. (Nota de Redacción: Una vez finalizado el proceso de elección y cerrada la designación de Coronado, Molina confirmó la información a VSN en el día de la fecha).

La Comisión de Asuntos Vecinales interviene

El conflicto escaló un día después. El 5 de diciembre, la Comisión de Asuntos Vecinales del Concejo Deliberante —presidida por Gonzalo Gerez (Frente de Acción Vecinal) e integrada por Cárdenas y Cofré— envió una nota formal a Molina, recordándole la obligación de convocar a la votación y exigiendo que la reunión del Consejo Vecinal se realizara dentro de los tres días de notificada.

En la comunicación, la comisión repasó el marco normativo aplicable: los artículos 274 y 275 de la Carta Orgánica Municipal, la ordenanza 113/19 y su modificatoria 170/20. Allí también dejó constancia de que Analía Coronado se encontraba en condiciones de participar y postularse, sin impedimentos legales.

La nota incluyó además una serie de advertencias dirigidas al Consejo Vecinal y a los presidentes barriales:

Un exhorto a sesionar en un clima de respeto, diplomacia y convivencia armónica, atendiendo a los episodios registrados el 2 de diciembre.

Un llamado de atención a quienes no justifican sus ausencias en tiempo y forma, recordando que es obligación de cada Junta Vecinal informar debidamente sus faltas.

El anuncio de que la comisión comenzará a controlar asistencias e inasistencias para “fortalecer el organismo”.

La advertencia de que se tomarán acciones frente a cualquier situación de violencia confirmada, con el fin de proteger el normal funcionamiento del Consejo Vecinal.

La intervención buscó encauzar el proceso y asegurar que se cumpliera con la obligación de elegir a la nueva representante antes del vencimiento del plazo legal.

La votación y el cierre del conflicto

Finalmente, el 7 de diciembre el Consejo Vecinal se reunió y llevó adelante la votación. Con la participación de los presidentes barriales habilitados, Coronado resultó electa para ocupar la Banca del Pueblo durante el próximo período.

La definición permitió destrabar el conflicto institucional y garantizar la continuidad del mecanismo de representación ciudadana previsto por la legislación local. Con el nombramiento confirmado, el Concejo Deliberante podrá completar su integración conforme a la normativa vigente.

La semana dejó, no obstante, señales de alerta sobre el funcionamiento interno del Consejo Vecinal: tensiones entre referentes barriales, injerencia de concejales en la autonomía del Consejo Vecinal, pedidos de mayor orden administrativo y advertencias formales sobre la necesidad de sostener espacios de diálogo y convivencia en un organismo clave para la participación comunitaria de Catriel.