El Tribunal Oral Federal 2, responsable de ejecutar la condena a Cristina Fernández de Kirchner en la causa Vialidad, evalúa imponer nuevas restricciones a su prisión domiciliaria. Entre las medidas que están en estudio se encuentran la prohibición de uso de redes sociales, un control estricto de las visitas y la prohibición de realizar apariciones públicas desde su balcón.
Aunque por ahora no hay una decisión tomada, fuentes judiciales confirmaron que el tribunal no descarta negar el beneficio de la prisión domiciliaria, solicitado por la defensa de la expresidenta para que la pena se cumpla en su domicilio del barrio porteño de Constitución, donde militantes mantienen una vigilia permanente.
El juez Jorge Gorini, presidente del TOF 2, pospuso una licencia para tratar el tema el próximo miércoles junto a sus colegas Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso. Los tres jueces ya habrían discutido internamente el esquema de restricciones, en línea con los pedidos de los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola, que insisten en una postura más rigurosa respecto a la ejecución de la pena.
La posibilidad de restringir la exposición pública desde su domicilio apunta a evitar manifestaciones políticas o discursos que puedan intensificar la movilización de sus seguidores. También se considera que el uso de redes sociales podría ser regulado bajo criterios similares.
En un extenso mensaje publicado este viernes, Cristina Fernández solicitó que se le permita cumplir la condena en su casa, argumentando motivos de seguridad personal. “No se trata de un privilegio”, escribió.
Mientras tanto, la expresidenta espera otros tres procesos judiciales: Cuadernos (con inicio confirmado para el 6 de noviembre), el caso Hotesur-Los Sauces y la causa del memorándum con Irán, aún sin fechas definidas.
El debate en el TOF 2 sobre las condiciones de detención podría marcar un nuevo capítulo en la relación entre el Poder Judicial y la principal figura del peronismo.
Fuente: La Política Online.