Un operativo conjunto entre la Policía de Río Negro y el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) permitió decomisar 300 kilos de carne bovina con hueso que eran trasladados de manera irregular hacia la ciudad de Catriel, sin cumplir con las condiciones sanitarias exigidas por la normativa vigente.

El procedimiento se llevó a cabo durante la tarde del viernes, minutos antes de las 15 horas, en un control realizado por personal del Destacamento Puente Dique Catriel. En ese marco, los agentes detuvieron una camioneta Toyota Hilux negra que circulaba en sentido este-oeste y cuyo conductor provenía de la provincia de La Pampa, con destino final en Catriel.

Durante la inspección del rodado, los efectivos constataron que la carne transportada no contaba con refrigeración adecuada, ni con la documentación sanitaria obligatoria, lo que motivó su inmediato decomiso para evitar riesgos para la salud de la población.

Controles similares en General Roca

En el marco de operativos de tránsito realizados en la madrugada del martes, personal del Cuerpo de Seguridad Vial de Paso Córdoba, en General Roca, secuestró un total de 25 corderos faenados que eran trasladados de manera irregular en dos vehículos particulares.

El primer procedimiento se efectuó tras detener un Chevrolet Corsa que circulaba de sur a norte. Al inspeccionar el vehículo, los agentes detectaron 11 ovinos faenados, algunos ubicados en el interior del habitáculo y otros en el baúl. La mercadería no contaba con documentación respaldatoria, sellos del SENASA ni cumplía con la cadena de frío, y el rodado no estaba habilitado para el transporte de alimentos de origen animal.

Pocos minutos después, en un segundo control realizado en la misma zona, fue interceptado un Fiat Cronos que trasladaba 14 corderos faenados en el baúl, en condiciones similares: sin refrigeración, sin certificación sanitaria y sin autorización para el transporte de productos cárnicos.

En ambos casos, se labraron las actas de infracción correspondientes y se procedió a la incineración de la carne, conforme a lo establecido por la Ley Provincial N.º 2534. Las actuaciones se realizaron con testigos presentes, siguiendo los protocolos vigentes para garantizar la transparencia de los procedimientos.

Desde las fuerzas intervinientes destacaron que estos controles buscan prevenir la circulación de alimentos en condiciones irregulares, proteger la salud pública y desalentar el comercio ilegal de productos de origen animal.