La provincia de Río Negro anunció un ambicioso proyecto de conectividad que busca llevar internet de alta velocidad a sus regiones más remotas. En colaboración con Starlink, la empresa de internet satelital propiedad del multimillonario Elon Musk, y la compañía estatal rionegrina Altec, se están instalando antenas de internet satelital en 25 comisiones de fomento de la Región Sur y la zona cordillerana.
Este servicio, que utiliza una red de satélites de órbita baja, permitirá a los habitantes de estas áreas acceder a una conexión de alta velocidad, superando las limitaciones geográficas y demográficas que dificultan el acceso a internet mediante métodos convencionales como el cableado de fibra óptica. Desde la Gobernación provincial, destacaron que este proyecto no solo mejora la infraestructura, sino que también representa «una verdadera revolución en la vida de muchos rionegrinos», al abrir nuevas oportunidades digitales.
El costo del servicio de Starlink en Río Negro variará según las condiciones específicas de cada zona, pero se espera que sea más accesible en comparación con otras soluciones de conectividad en áreas de difícil acceso. El objetivo es garantizar que todos los habitantes de la provincia, independientemente de su ubicación o situación socioeconómica, puedan conectarse al mundo digital.
La instalación de la primera antena ya se completó, y se espera que el proyecto avance rápidamente para cubrir las 25 comisiones de fomento planificadas. Este esfuerzo conjunto entre el sector público y la tecnología de vanguardia busca cerrar la brecha digital en Río Negro y ofrecer un acceso inclusivo a internet para todos.
El servicio que la compañía ofrece en la argentina permite una conexión de banda ancha con velocidades de entre 150 y 220 megabits por segundo (Mbps), que no difiere demasiado de la velocidad de los sistemas de conexión tradicionales (actualmente, en el rango de los 100 a 300 Mbps, en la mayoría de los casos).
La principal ventaja de la internet satelital es su baja latencia, es decir, la rapidez con la que llegan los datos enviados desde otro equipo. Esto es especialmente importante en los chats, las videollamadas (como reuniones de Zoom o Meet) y el streaming.
Para las conexiones particulares, el costo actual de Starlink ronda los $60.000 para hogares, a los que hay que sumarle un pago de $500.000 (actualmente bonificado al 50%) por el equipo receptor.