La Ruta 151: Forbes reveló el nuevo modelo de obra pública con impacto directo en Catriel

Según adelantó Forbes Argentina, será una de las primeras obras viales financiadas por privados. Catriel queda en el centro del plan, con infraestructura colapsada, presión logística y un modelo que prioriza el capital sobre el Estado.

Según reveló Forbes Argentina, el Gobierno nacional proyecta transformar la Ruta 151 en uno de los primeros tramos viales financiados por capitales privados. A la par, de acuerdo a los anuncios recientes, Catriel aparece como nodo logístico clave para el desarrollo del norte de Vaca Muerta, mientras Río Negro refuerza su estrategia energética con mayor previsión que otras provincias.

El Gobierno nacional avanza con un nuevo modelo de obra pública que prescinde del financiamiento estatal directo. Según publicó Forbes Argentina, el plan apunta a activar mecanismos de concesión con participación empresarial privada en tramos viales estratégicos, con un caso testigo en la región: la Ruta Nacional 151, que une Cipolletti con Catriel y conecta Río Negro con La Pampa.
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El esquema contempla además la reactivación de la Ruta 22 —paralizada desde hace más de una década en el tramo Regina-Cipolletti— y el desarrollo de un nuevo corredor detrás del eje urbano del Alto Valle, la llamada “Barda Norte”, pensada como vía industrial alternativa. La inversión proyectada para este primer paquete ronda los 400 millones de dólares. La ejecución estaría a cargo de consorcios empresariales que, a través de un canon aplicado al tránsito pesado (principalmente petrolero), recuperarían lo invertido en construcción, operación y mantenimiento.

Un plan de Nación que aterriza en una demanda histórica

La inclusión de la 151 en este modelo representa una novedad para Catriel, aunque no así para sus habitantes. La ruta ha sido eje de reclamos por deterioro, siniestralidad y postergación durante al menos tres gestiones presidenciales. A pesar de su carácter estratégico —como corredor energético, comercial y social—, los trabajos estructurales nunca se concretaron. El anuncio actual genera atención, pero también cautela: en Catriel persiste una cultura política de “ver para creer”.

Durante el 126° aniversario de la ciudad, el gobernador Alberto Weretilneck anunció que Río Negro presentará una demanda judicial contra el Estado nacional por la falta de cumplimiento en las obras prometidas sobre esta vía. La intendenta Daniela Salzotto respaldó la decisión y reiteró la necesidad de una Catriel integrada a los corredores productivos, con planificación territorial y acceso al empleo formal.

Una mirada desde el territorio: Catriel, petróleo y límites de la planificación

Catriel ocupa una posición geográfica crítica en el mapa energético del país. Es base operativa, polo de servicios y enlace entre tres provincias productoras: Río Negro, Neuquén y La Pampa. Su infraestructura, sin embargo, no creció al ritmo de la demanda petrolera. La saturación del tránsito pesado, el deterioro vial y los problemas de conectividad afectan tanto a la logística como a la vida cotidiana. Esto impacta en la industria, pero también en los usuarios de la ruta que enfrentan los riesgos a diario y aún más en los habitantes de la ciudad que afrontan desde hace décadas dificultades para acceder a servicios de salud especializada o realizar trámites judiciales y administrativos.

Desde el área de Planificación y Desarrollo local, Milton Molina señaló que con menos de 120 kilómetros de pavimento se podría mejorar la conexión entre Catriel y zonas clave de producción como Shell, Médano de la Mora y Cruz de Lorena. Aunque estas trazas no están incluidas en el paquete de obras revelado por Forbes, representan una propuesta alternativa complementaria dentro de un contexto de necesidad urgente para la economía local.

Río Negro, por su parte, brindó señales de anticipación. Una fuente del Gobierno provincial aseguró a este medio que “la provincia está un paso adelante respecto a otras jurisdicciones” en la planificación del desarrollo no convencional a futuro. Como contraste, citó el caso de La Pampa, donde a pocos meses del vencimiento de concesiones importantes, todavía no hay certezas sobre el estado de los activos ni de la política futura. De hecho, recientemente hubo una protesta de 100 operarios de Medanito en el Puente Dique que une Catriel y 25 de Mayo.

Vista Oil & Gas —titular de concesiones como Entre Lomas y Medanito— tiene presencia activa en Catriel, y en torno a sus operaciones se articula buena parte del empleo y la actividad de servicios regional. Otras operadoras con injerencia en la zona son Aconcagua Energía y Petróleos Sudamericanos. Se prepara una reunión entre la Secretaría de Energía de Río Negro y la Cámara de Servicios Petroleros (CASEPE) para intercambiar diagnósticos, revisar cuellos de botella y sostener los niveles de empleo en la etapa actual.

La CASEPE se reunirá próximamente con Energía para analizar la coyuntura actual y los caminos a seguir.

El entramado de servicios, entre el sostenimiento y la tensión

Aunque no se registraron despidos masivos, distintos referentes del sector de servicios hidrocarburíferos advierten un panorama ajustado. Las pymes locales denuncian dificultades para cobrar trabajos realizados, una baja sostenida en los pedidos y condiciones contractuales poco claras. “El desarrollo del norte de Vaca Muerta puede tardar entre cinco y seis años. El punto es quién puede sostenerse hasta entonces en estas condiciones”, advirtió un empresario regional.

Desde CASEPE, su presidente Ramiro Arceo destacó que la situación es compleja, pero aún gestionable. Reiteró la necesidad de responsabilidad colectiva, previsibilidad institucional y soluciones sostenibles en el tiempo. La provincia, por su parte, intervino recientemente en el yacimiento Medanito Sur a través de la Secretaría de Trabajo, donde se acordó la incorporación de siete trabajadoras y trabajadores catrielenses, tras una inspección solicitada por la UOCRA. De todas formas, los grupos de desocupados aseguran que hay alrededor de 400 personas esperando un cupo.

Más que una obra: un modelo en disputa

El proyecto de concesión privada sobre la Ruta 151 abre una puerta concreta para renovar infraestructura clave, pero también plantea interrogantes estructurales: ¿Quién define las prioridades de inversión? ¿Qué garantías existen para la inclusión de las comunidades locales? ¿Cómo se distribuyen los beneficios del desarrollo cuando el capital —y no el Estado— toma la iniciativa?

En Catriel, la oportunidad está planteada. La comunidad, el empresariado y el sector público coinciden en que el desarrollo no puede construirse sobre la base del desgaste. Pero también saben que las promesas, por sí solas, no asfaltan caminos.