El sistema de salud en Río Negro enfrenta una crisis sin precedentes, que afecta directamente a Catriel y otras localidades del Alto Valle Oeste. Según denuncias del gremio Asspur, el Hospital de Cipolletti, un centro de referencia regional, está atravesando un proceso de «vaciamiento» que impacta gravemente en la atención médica de toda la región. La falta de profesionales, insumos y recursos en el hospital cipoleño pone en riesgo la atención de miles de pacientes, incluyendo los de Catriel, que dependen de su capacidad operativa.
El delegado de Asspur, Santiago Cayupan, describió un panorama desolador: un éxodo masivo de médicos y enfermeros, déficit de especialistas como pediatras y ginecólogos, y la reducción drástica de camas de Unidad de Terapia Intensiva (UTI). «Hoy solo hay cinco camas UTI para un centro de salud de complejidad 6, que es cabecera de todo el corredor del Alto Valle Oeste, desde Catriel hasta Fernández Oro. Durante la pandemia hubo tres salas de UTI con más de 10 camas, pero hoy ese número se redujo significativamente», afirmó Cayupan.
Derivaciones y sobrecarga: la atención de Catriel en riesgo
El impacto de esta situación en Catriel es preocupante. El Hospital de Cipolletti no solo es un centro de referencia, sino también un punto crucial de derivación para los pacientes de Catriel que requieren atención de alta complejidad. La falta de camas y recursos en Cipolletti obliga a derivar a los pacientes al sistema privado, un costo que muchas veces el sistema público debe absorber si el paciente no cuenta con cobertura de obra social. Esta situación genera demoras y aumenta la vulnerabilidad de los habitantes de Catriel que ya enfrentan dificultades para acceder a servicios de salud especializados.
La crisis en Cipolletti refleja un problema más amplio en toda la provincia. Catriel, al no contar con un hospital de alta complejidad, depende en gran medida de los recursos disponibles en Cipolletti. «Cada vez es más difícil para nosotros gestionar derivaciones, y los tiempos de espera pueden ser críticos para los pacientes», comentó un profesional de la salud local, que prefirió no ser identificado.
Éxodo de profesionales y falta de especialistas
Otro problema crítico es el éxodo de profesionales hacia el sector privado o hacia la provincia de Neuquén, donde las condiciones laborales son más atractivas. Esta fuga no solo afecta a Cipolletti, sino que repercute directamente en la disponibilidad de especialistas para atender a pacientes derivados desde Catriel. La falta de pediatras, ginecólogos y generalistas genera una cadena de complicaciones que terminan afectando a los sectores más vulnerables.
«Muchos profesionales prefieren trabajar en el privado o en Neuquén, donde los salarios son mejores. Mientras tanto, el gobierno provincial no implmenta políticas efectivas para retenerlos ni para mejorar las condiciones de trabajo en los hospitales públicos», sostuvo Cayupan.
La renuncia de la exministra de Salud, Ana Senesi, dejó al sistema sin una conducción clara en un momento de extrema necesidad. Asspur reclama la designación urgente de un nuevo ministro o ministra de Salud que pueda gestionar y canalizar las demandas de los trabajadores y asegurar que los recursos lleguen a los hospitales.
*Por Talia Bobadilla – Lic. en Trabajo Social UNC (Universidad Nacional de Córdoba)
El pasado mes de agosto, Catriel se unió a la celebración del Mes de la Lactancia Materna con una serie de actividades organizadas por el Hospital local, con el objetivo de promover y visibilizar esta práctica fundamental para el desarrollo infantil y la salud materna.
La lactancia materna va más allá de ser un acto nutritivo; es un vínculo profundo que se establece desde el primer contacto entre madre e hijo. Este año, bajo el lema mundial «Cerrar la brecha: apoyo a la lactancia materna para todos», se destacó la importancia de apoyar esta práctica como un factor clave para reducir desigualdades sociales.
En una entrevista con Joanna Cisterna, obstetra del Hospital de Catriel, charlamos sobre la necesidad continua de concientizar desde salud pública sobre los beneficios físicos y socioafectivos de la lactancia materna. Joanna destacó que la leche materna, «además de proporcionar nutrientes esenciales, ofrece protección natural contra enfermedades, contribuyendo al crecimiento saludable de los bebés. Para las madres, amamantar reduce el riesgo de complicaciones posparto y enfermedades como el cáncer de mama, promoviendo su bienestar a largo plazo».
Sin embargo, a pesar de sus beneficios comprobados, la lactancia materna enfrenta desafíos significativos. Interrogantes sobre cómo y dónde amamantar, influidos por factores culturales, sociales y económicos, a menudo ponen en tela de juicio este acto íntimo.
La Lic. Cisterna subraya que “el apoyo a la lactancia materna es un compromiso de toda la sociedad”. Es importante enfatizar en la necesidad de que las políticas públicas respalden esta práctica con medidas concretas, como licencias por maternidad adecuadas, espacios privados y equipados para la lactancia en lugares públicos y laborales, y acceso a asesoramiento especializado en salud.
Durante el mes de concientización, se llevaron a cabo diversas actividades organizadas desde el Hospital, como diversas charlas informativas, incluso con la participación de la Dra. Núñez, pediatra del nosocomio. Todavía se encuentra folletería informativa disponible para toda persona interesada en profundizar en el tema.
A pesar de los esfuerzos, iniciativas como el proyecto de implementación de un Banco de leche en 2023 fueron truncadas por la falta de recursos materiales y humanos necesarios para su operación. Este proyecto tenía como objetivo proporcionar leche materna segura y de alta calidad a bebés prematuros y con condiciones médicas especiales.
Promover y apoyar la lactancia materna no es solo una cuestión de salud pública, sino también un paso crucial hacia una sociedad más equitativa y consciente de los derechos y decisiones de las madres y sus hijos.
La situación de la salud pública en Río Negro atraviesa una de sus peores crisis, marcada por deficiencias en la infraestructura, falta de insumos, renuncias de profesionales y riesgos laborales que exponen a trabajadores y pacientes a situaciones extremas. Un ejemplo reciente que refleja este estado de precarización es el fallo judicial que determinó la indemnización para una enfermera de Viedma, quien sufrió graves quemaduras tras la explosión de una salita de salud debido a una fuga de gas. El hecho, que evidenció la falta de mantenimiento en las instalaciones, dejó a la trabajadora con secuelas físicas y psicológicas permanentes, resaltando las condiciones de riesgo a las que están expuestos los trabajadores de la salud.
La renuncia de la ministra de Salud, Ana Senesi, y la interinidad de la cartera en manos del Ministro de Hacienda, Gabriel Sánchez, no hacen más que profundizar la incertidumbre. Senesi dejó su cargo en medio de conflictos laborales y demandas insatisfechas del personal hospitalario, que reclama mejores condiciones laborales y salariales. Su salida se suma a un gabinete que se encuentra en plena reestructuración y que enfrenta el desafío de encontrar un liderazgo capaz de afrontar la grave crisis sanitaria que atraviesa la provincia.
En paralelo, la Federación Sindical de Profesionales de la Salud (FESPROSA) y la Asociación Sindical de Salud Pública de Río Negro (ASSPUR) expresaron su preocupación por la ausencia de una conducción clara y por la falta de recursos económicos suficientes para garantizar la atención médica adecuada. Los gremios advierten sobre la necesidad urgente de una respuesta económica y política que permita revertir la situación, especialmente en un momento en el que se están discutiendo reformas legales que podrían afectar aún más los derechos de los trabajadores de la salud.
La presidenta de FESPROSA, María Fernanda Boriotti, subrayó que el número creciente de reclamos se debe a que los gobiernos provinciales dieron aumentos salariales muy por debajo de la inflación, con una pauta del 5% mensual que está lejos de las necesidades reales. Boriotti advirtió que estas políticas salariales, alineadas con la estrategia del gobierno nacional de ofrecer aumentos insignificantes del 2% en septiembre y 1% en octubre, están profundizando el deterioro de las condiciones de vida de los trabajadores de la salud. La dirigente anticipó que el próximo lunes 9 de septiembre, el Consejo Ejecutivo Nacional de FESPROSA se reunirá para evaluar la situación y definir posibles medidas de apoyo a las luchas provinciales.
Un informe reciente del Ministerio de Salud de Río Negro detalla el deterioro del sistema hospitalario. A pesar de que las autoridades aseguran una respuesta «ininterrumpida y continua» en los hospitales, los datos muestran una realidad distinta: problemas de infraestructura no resueltos, equipamiento médico en mal estado, y un parque automotor obsoleto que incluye ambulancias con más de dos décadas de uso. Además, las deudas con prestadores externos, que alcanzan los 4.026 millones de pesos, ponen en evidencia la falta de recursos para cubrir la atención básica de los pacientes.
El éxodo de médicos del sistema público agrava aún más el panorama. Profesionales de especialidades críticas como ginecología, pediatría y clínica médica están abandonando sus puestos en los hospitales públicos para trasladarse al sector privado, donde encuentran mejores condiciones laborales y salarios más competitivos. Este éxodo no solo implica una pérdida de recursos humanos clave, sino que también genera un vacío en la atención médica que difícilmente puede ser cubierto. Los profesionales que aún permanecen en el sistema denuncian la falta de incentivos para atraer y retener médicos, y advierten que, de seguir así, muchos servicios podrían desaparecer en los próximos años.
La situación plantea un escenario de alta complejidad. Por un lado, la falta de liderazgo en el Ministerio de Salud y la ausencia de un plan claro dificultan la implementación de medidas que puedan revertir la crisis. Por otro, la constante tensión con los gremios y la carencia de recursos económicos suficientes limitan la capacidad del gobierno provincial para responder de manera efectiva a las demandas del sector. En términos de probabilidad, la continuidad de la crisis es el escenario más previsible si no se producen cambios sustanciales en la gestión de la salud pública en Río Negro.
La interpelación a la sociedad es inevitable. La pregunta que surge es hasta cuándo la comunidad rionegrina puede tolerar un sistema de salud que no garantiza condiciones mínimas de seguridad y calidad en la atención. La precarización no solo afecta a los trabajadores, que día a día enfrentan riesgos y cargas laborales insostenibles, sino también a los pacientes, que se ven privados de una atención digna y accesible. Es una necesidad exigir respuestas concretas y construir un sistema de salud que priorice el bienestar de toda la comunidad, con políticas públicas que pongan a la salud como un derecho esencial y no como una promesa incumplida.
El Centro Médico Privado Catriel emitió un comunicado firmado por su director médico, Dr. Sergio M. Obrist, en el que informa sobre un reciente incidente ocurrido en la institución, y reafirma su compromiso con la ética y el cuidado de los pacientes. El comunicado señala que, tras una denuncia por conducta inapropiada de un profesional hacia una paciente durante una práctica médica, el director decidió desvincular inmediatamente al profesional involucrado y alertar a otros directores médicos de la región.
Obrist agradeció la valentía de la paciente que se animó a hablar sobre lo sucedido y destacó que, a partir de esa denuncia, otras mujeres también se animaron a relatar situaciones similares. Lamentó, además, que a pesar de las advertencias emitidas, el profesional en cuestión ya se encuentre trabajando en otra institución médica.
“Nosotros tenemos una trayectoria de muchos años en la localidad, iniciada por mi padre y continuada por mí y nuestro equipo, siempre honrando la relación médico-paciente”, expresó Obrist en el comunicado, reafirmando el compromiso del centro con los principios de moral y ética profesional.
En el mismo comunicado, el Dr. Obrist también anunció la renovación de la habilitación sanitaria del Centro Médico Privado Catriel por cinco años más, tras la inspección de Salud Pública. Esta renovación posiciona a la institución como una de las tres en Catriel que cuentan con la habilitación oficial para el ejercicio profesional.
Obrist hizo un llamado a la comunidad a exigir que los centros de salud cumplan con las normativas vigentes y destacó la importancia de elegir instituciones habilitadas para proteger la salud y seguridad de los pacientes. “El poner un centro médico no solo es un cartel, es mucho más; es moral y ética”, concluyó el director médico.
Según pudo averiguar VSN, el profesional desvinculado es un oculista oriundo de Córdoba, quien, a pesar de las acusaciones en su contra, busca seguir ejerciendo en la localidad. Obrist, como director del Centro Médico Privado Catriel, señaló que tomó la decisión de advertir públicamente sobre la situación debido a la gravedad de las acusaciones recibidas y para proteger a los pacientes. Además, informó a sus colegas de otras instituciones sobre los hechos denunciados, con el fin de prevenir que situaciones similares se repitan en otros establecimientos de salud.
La ministra de Salud de Río Negro, Ana Senesi, presentó su renuncia este lunes, según informó el Gobierno provincial a través de un comunicado oficial. La salida de Senesi ocurre en un contexto de reestructuración del gabinete, que incluye también las dimisiones del Secretario de Turismo, Marcos Barberis, y del Secretario de Cultura, Martín Fraile. En forma provisional, el Ministro de Hacienda, Gabriel Sánchez, asumirá la conducción de Salud hasta la designación de un nuevo titular.
Senesi había asumido el cargo en diciembre pasado, proveniente del hospital López Lima de General Roca, donde se desempeñó como directora durante varios años. Su gestión al frente del Ministerio de Salud estuvo marcada por un complejo panorama de conflictos laborales, con paros y protestas del personal hospitalario que exigía mejoras salariales y condiciones laborales dignas. Si bien los reclamos gremiales se apaciguaron en los últimos meses, trascendió un malestar interno en el ministerio, particularmente por la falta de comunicación entre Senesi y su segundo, José Pacayut.
El gobernador de la provincia, Alberto Weretilneck, agradeció a Senesi por su labor, al igual que a los otros funcionarios que dejaron sus cargos. “En los próximos días anunciaremos a las personas que asumirán la responsabilidad de estas áreas clave y que continuarán trabajando con firmeza para fortalecer nuestra gestión y avanzar en los objetivos de nuestro gobierno”, expresó en su cuenta de X.
La salida de Senesi deja a la cartera de Salud sin una dirección estable en un momento crítico para el sistema sanitario de la provincia. Hasta que se designe a un nuevo responsable, Gabriel Sánchez, ministro de Hacienda, quedará a cargo del área de forma interina.
Cambios en Turismo y Cultura
Además de la renuncia de Senesi, el Gobierno confirmó la dimisión de Marcos Barberis como Secretario de Turismo. Barberis había asumido al inicio de la gestión de Weretilneck, luego de que se eliminara el Ministerio de Turismo para integrarlo como Secretaría de Estado bajo la órbita del Ministerio de Gobierno. Barberis, conocido por su vínculo cercano con el sector turístico de Bariloche, no ofreció declaraciones sobre las razones de su renuncia.
Martín Fraile, hasta hoy Secretario de Cultura, también presentó su renuncia. Fraile, reconocido músico y director orquestal, anunció que regresará a la Filarmónica de Río Negro, institución con la que mantiene un fuerte lazo profesional y personal. A través de sus redes sociales, agradeció al gobernador por la confianza y se comprometió a seguir contribuyendo al desarrollo cultural de la provincia desde la Filarmónica.
Estas renuncias representan un desafío significativo para el gobierno de Weretilneck, que deberá cubrir rápidamente estos puestos clave para garantizar la continuidad de los proyectos en marcha y enfrentar los retos administrativos en un contexto de ajuste y recomposición del gabinete.
La Asociación Sindical de Salud Pública de Río Negro (ASSPUR), afiliada a la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA), comenzó hoy un proceso electoral histórico con la participación de 1.455 afiliados en 28 localidades de la provincia. Las elecciones se llevarán a cabo en tres etapas, los días 28, 29 y 30 de agosto, y buscan fortalecer la organización y legalización del gremio exclusivo de salud en Río Negro.
Cesira Mullaly, Secretaria General de ASSPUR, declaró que esta elección es fundamental para culminar el proceso de organización y regularización del sindicato ajustándose a los requisitos de la ley nacional. Esta es la primera elección general de ASSPUR, lo que permite a cada trabajador elegir y legitimar las conducciones del gremio.
“Es una cuestión fundamental culminar el proceso de organización y legalización de nuestro sindicato, de regularización de acuerdo a los términos de la ley y de acuerdo a lo que nos indica el Ministerio de Trabajo que nos otorga la inscripción gremial”, señaló. Además, la Secretaria General destacó que este proceso eleccionario es «histórico y permite que los trabajadores y trabajadoras de salud de la provincia elijan y legitimen a las conducciones del gremio».
En Catriel, las elecciones están programadas para el 29 de agosto de 10 a 14:30 en el Hospital Cecilia Grierson. En Viedma, San Antonio Oeste, Las Grutas, Luis Beltrán, Lamarque, Choele Choel, Río Colorado, Coronel Belisle, Villa Regina, Chichinales, Ingeniero Huergo, Cervantes, Allen, Valcheta y General Roca se voto durante la jornada del 28 de agosto. El 29 de agosto, además de Catriel, votarán en Cipolletti, Fernández Oro, Cinco Saltos y Campo Grande. El 30 de agosto, las votaciones se realizarán en Bariloche, Ingeniero Jacobacci, Maquinchao y Sierra Colorada.
Desde ASSPUR destacan la importancia de estas elecciones como un paso hacia la consolidación de su estructura sindical, con el compromiso de continuar la defensa de los derechos de los trabajadores y la lucha por una salud pública gratuita y de calidad para todos los rionegrinos. Agradecen el trabajo conjunto de delegados y autoridades de mesa que participan en el proceso.
El pasado viernes, 23 de agosto, participé en una jornada de prevención del suicidio en mi ciudad, Catriel. Un día antes, se cumplieron tres años desde que mi mejor amiga, Soledad, decidió quitarse la vida. Soledad Gordo, como la nombraron su mamá y su papá en el DNI, fue simplemente «la Sole» para nosotros. La conocí desde los siete años; fuimos juntos a la escuela primaria 241 y compartimos más de 25 años de amistad. Hay poco que no haya dicho o escrito ya en mis redes sociales sobre lo que me pasa cuando pienso en ella. Por supuesto, hay muchos aspectos de su vida que no me corresponde compartir, pero hay otros que sí.
Sole era una persona llena de vida y energía, una mamá increíble, cantante de la banda de reggae Esquejes y una amiga incondicional. Trabajó en todo tipo de cosas: actriz de cortos, peluquera, kiosquera, vendedora de velas, desayunos, amuletos, muebles restaurados; lo que fuera necesario para llevar comida al plato de sus hijos y para pagar las cuentas cuando llegaban los avisos de corte de servicio. Desde chica, se la bancó como pudo cada vez que la vida la golpeó feo, y siguió adelante con una fortaleza y determinación admirables, siempre dando lo mejor de sí. La vi crecer yendo siempre para adelante, dejando todo para criar a sus hijos e intentar ser feliz. Era una de las almas más gentiles y alegres que conocí, de las más nobles y sensibles a la condición humana que uno pudiera encontrar. Sole vivía genuinamente su vida. No tenía medias tintas: te quería o no te quería. Pero siempre estaba atenta a los detalles importantes de la vida de los demás, poniéndolos incluso por encima de ella misma. Era el motor de cosas maravillosas, le daba a otros la fuerza para vivir que a veces ella misma no tenía. Y aunque se suicidó, no quería morir.
Lo sé porque la conocí profundamente. Porque con nadie más compartí y trabajé tanto codo a codo como con Sole en estos últimos años de mi vida. Con nadie conversé tanto sobre las miserias e injusticias del mundo adulto, sobre lo difícil que es a veces esta locura en la que vivimos inmersos. Este ritmo desquiciante que propone y muchas veces impone el día a día.
Hoy, me cuesta la vida. Me cuesta levantarme de la cama todos los días. Durante los últimos tres años, pensé en suicidarme al menos una vez por año. No porque quisiera dejar de vivir, sino porque el dolor que me genera su partida y su ausencia es peor que cualquier dolor que haya sentido jamás. Sé que no soy el único que sufre por esta situación. Hay muchísimas personas que sienten la partida de Sole: hijos, amigos, hermanas, un papá y una mamá, gente que trabajó o compartió momentos hermosos con ella. Y no somos los únicos que vivieron algo tan desolador. Quizá me extralimito al mencionarlos, pero me atrevo a hacerlo porque merecen ser recordados. Personas que querían vivir y no pudieron seguir haciéndolo en muchos de estos casos porque el dolor profundo que sentían les arrebató la vida o porque como comunidad no teníamos los recursos y herramientas para ayudarlos. Años atrás, Palo, Martín, Emiliano, Marcos. Un poco más acá en el tiempo, los casos de Jony, Félix… La lista sigue y sigue. Me es inconcebible e injusto pensar en cuántas personas se quitaron la vida o tuvieron tentativas en los últimos años. No solo en Catriel y alrededores, sino también en la ciudad vecina de 25 de Mayo. Tenemos que hacer algo, necesitamos hacer algo. Y siento que esta primera intervención es la oportunidad que esperábamos para dar un gran paso.
Quiero destacar la importancia de lo que hizo el municipio de Catriel. Esta jornada me ayudó a decidir compartir mi experiencia como sobreviviente del suicidio de mi amiga. Pido disculpas si al expresarme afecto el sentir de alguien más, pero considero importante hablar y no callar estas cosas nunca más. Aunque tengo diferencias marcadas con este gobierno municipal, como las tuve con el anterior, y no voy a dejar de expresarlas, reconozco que es clave lo que hicieron al llevar adelante esta jornada de prevención. Este tipo de intervenciones sociocomunitarias para prevenir el suicidio llega tarde, es cierto. Hemos perdido a muchos que podríamos haber salvado. Pero eso no es culpa de esta gestión. Los dirigentes que estuvieron antes deberían haber realizado este tipo de intervenciones. Esto debería hacerse desde hace años, en Catriel y en todos lados. Pero mientras haya vida, nunca es tarde, y eso significa que estamos a tiempo de ayudar a muchas personas que necesitan ser comprendidas y acompañadas para sobrellevar sus situaciones. Esto podría evitar más suicidios en el futuro y salvar vidas. Bien lo dijo Mandri en su intervención: «Una vida salvada modifica generaciones enteras».
Por eso, desde mi lugar, pido que la comunidad de Catriel no deje pasar esto como deja pasar tantas cosas a las que presta atención dos segundos y sigue adelante. Involucrémonos para prevenir el suicidio: seamos más empáticos, estemos atentos a las señales de alerta, a los cambios bruscos en el comportamiento, el aislamiento, o la pérdida de interés en actividades que antes eran importantes para las personas que queremos y también aquellas con las que mantenemos contacto diario. En la jornada también se habló de la importancia de un enfoque sociocomunitario, donde todos, especialmente los jóvenes, se involucren en la prevención. Cada uno de nosotros puede aportar su parte, y ese aporte, por pequeño que parezca, es vital. Por supuesto, los medios de comunicación también tenemos nuestra responsabilidad en esto. Como parte de mi compromiso personal en esta lucha, estoy a disposición para trabajar en lo que sea necesario. Porque hablar de esto, actuar y no callarse, es la única manera de prevenir más pérdidas y salvar vidas.
Para terminar, quiero contarles algo más. Después del suicidio de Sole, durante mucho tiempo utilicé mis redes sociales personales para expresarme sobre lo que sentía. Fue un espacio donde compartí reflexiones, recuerdos y pensamientos en momentos difíciles. Me ayudó a sobrellevarlos. Sin embargo, hace un tiempo decidí cerrarlas porque siento que cumplí un ciclo en ellas, tanto en su uso personal como en lo que respecta al posteo de mis vivencias. Entendí que no necesito hacer todo público. Sin embargo, hoy quiero aprovechar esta oportunidad para dedicarle por última vez algunas palabras a Soledad en un espacio más significativo, que pueda llegar a otros y contribuir a esta causa.
Nada me gustaría más que contarte, Sole, que conocí a esa chica de la que siempre me hablabas. «Amigo, vos tenés que buscarte alguien que te quiera de verdad y dejarte de joder. Que te ame y te acepte como sos, sin medias tintas ni boludeces», me decías. La encontré. O quizás ella me encontró a mí. Y me salvó la vida tanto como vos. Me hubiera encantado que pudieras conocerla; estoy seguro de que se habrían llevado bien porque tienen muchas cosas en común, sobre todo la calidez humana. Quedate tranquila, estoy en buenas manos. Por primera vez en mi vida, me siento amado y aceptado como soy. Me desgarra que no estés acá, decirte esto sin poder mirarte a los ojos, sin poder escuchar tu risa, sin verte sonreír con alegría después de chocar nuestras copas de vino.
Hoy te llevo como bandera. Sos mi espada y escudo contra el mundo. Cuando la vida duele o me sonríe. Cuando siento que no puedo más. Cuando redoblo mi esfuerzo y voy por más. Cuando alcanzo un logro y me siento gigante. Cuando todo me puede y me cuesta levantarme porque me siento insignificante. Pienso en vos, estés donde estés. Sos ese fuego que siempre va a estar ahí, el que convierte en luz todo lo gris dentro de mí. Te hice una promesa, y te aseguro que no me voy a ir de este mundo sin cumplirla.
Te vi criar a tus hijos y amarlos con todo el corazón, te vi cantar con talento y pasión, te vi llevar alegría y comida a los barrios de Catriel en el peor momento de la pandemia, ayudar a los que menos tienen sin llevarte ni pedir a cambio un peso, también escribir canciones para denunciar las injusticias del mundo y enseñarnos a luchar por un futuro más justo. Quiero recordarte siempre así. Te lo digo cada día, cuando me despierto. Sos mi inspiración para pelear todos los días por dejarle a los que vengan una realidad menos fea, salvaje y mezquina. Un mundo más lindo, donde la gente como vos se quiera quedar hasta el final. Donde exista y se cumpla el acceso a una salud mental de calidad. Donde haya lugar para la contención y el acompañamiento. Para la empatía comunitaria. Donde el actuar con humanidad no sea la excepción a la regla. Nos haces falta como no te das una idea, pero te volviste parte de mí. Tu mensaje es indeleble y lo tengo siempre presente.
Aunque tu ausencia me pesa y me lastima, tengo que admitir que te encuentro a cada rato. En los mates con los que tengo al lado, en las charlas con los que están a la distancia, en los pequeños momentos compartiendo un vino, un mate, una comida o una charla con quienes vemos en los ratitos que nos deja libre la cruel agenda del mundo adulto. En cada gesto de bondad desinteresado, en cada mimo a un animal callejero. En cada mirada cargada con ese amor de hermanos que hoy nos damos entre nosotros los que te conocimos. Nos enseñaste a querernos y cuidarnos distinto, sin especular, sin filtro. Sin dejar para después los «te quiero». A pronunciar con sinceridad los «¿cómo estás vos?». En mi pieza tengo tu foto que me cuida desde un rincón junto con cada regalo que me hiciste. Siempre te miro, te sonrío y te tiro chistes. Y aunque ya no pueda escuchar tus locas devoluciones, las imagino. Tu voz y tu risa viven dentro mío. Y hoy aprendí a encontrarte en el viento, el aire, el agua, el sol, la inmensidad de la montaña y el sonido de los pájaros. En la inmensidad del cielo cuando cae el atardecer o el brillo de las estrellas. Siento que te escondés en el infinito y te escapás para ser nuestra luz en los momentos críticos. O al menos lo sos en los míos. Por eso te escribo, para decirte lo importante que sos para mí. Hasta donde llegue, a dónde vaya, hermana, vos venís conmigo. Hasta el último suspiro.
Nos regalaste 32 años hermosos de tu presencia, fue un orgullo y un privilegio caminar a tu lado en estos últimos años de nuestras vidas. No sé por qué elegiste pasarlos tan cerca de mí. Aún hoy me lo pregunto… Pero hoy no quiero enfocarme en la tristeza ni extenderme demasiado. Solo agradecerte y celebrarte. No te olvido. Te extraño cada segundo. Te llevo conmigo, donde sea. Gracias por ser mi amiga. Por ser la mejor amiga posible para cada uno de nosotros. Gracias por arrancarme mil sonrisas y hacer mejor mis días. No sé cómo lo lográs, pero lo hacés todavía. Te quiero.
El 23 de agosto, la intendenta de Catriel, Daniela Salzotto, cerró la segunda de las dos jornadas de prevención del suicidio organizadas por la Municipalidad. En su discurso, Salzotto saludó a los estudiantes de secundaria y a los profesores presentes, destacando la importancia de su participación en un tema tan delicado y relevante para la comunidad.
Salzotto recordó su experiencia como legisladora provincial, cuando estableció contacto con el suicidólogo Marcelo Mandri, presidente de la Red Argentina de Suicidología, y reflexionó sobre la falta de discusión pública sobre el suicidio en esa época. Comentó que en ese entonces, tanto en Catriel como en Viedma, el suicidio era un tema tabú, del que pocos se atrevían a hablar abiertamente. «El primer gran mito que debemos superar es que no debe hablarse del suicidio para evitar que ocurra», afirmó, subrayando la necesidad de crear espacios de diálogo para abordar esta problemática.
La intendenta también hizo un llamado a la comunidad para que sea más empática y comprensiva con quienes atraviesan situaciones difíciles. «Hoy veo en este público presente muchas historias de familias que han padecido y atraviesan el dolor de la pérdida de un ser querido», dijo, pidiendo respeto y comprensión para aquellos que sufren en silencio. Salzotto enfatizó la necesidad de construir una red de contención en Catriel, que permita a jóvenes y adultos detectar señales de alerta en sus compañeros y amigos, y brindarles el apoyo necesario. «Catriel necesita una red de contención que ayude», sostuvo, instando a los presentes a ser parte activa de esta red y a enfrentar el desafío de prevenir el suicidio con determinación.
Al finalizar su intervención, Salzotto agradeció la participación de los jóvenes y los invitó a continuar involucrándose en la prevención del suicidio. «No tengamos miedo de enfrentar lo que se viene porque tienen enfrente una intendenta que está dispuesta a dar batalla a este tema», concluyó, para reafirmar su compromiso con la causa.
Durante la primera jornada de prevención del suicidio en Catriel, el antropólogo Juan Ivanissevich brindó una exposición centrada en la complejidad del fenómeno suicida y la importancia de abordarlo desde una perspectiva sociocomunitaria. Ivanissevich comenzó agradeciendo la masiva concurrencia a la charla, tanto en la sesión matutina como en la vespertina, y destacó la importancia de que estos temas se discutan de manera abierta en la comunidad.
Ivanissevich explicó que el suicidio es un fenómeno multicausal, es decir, que no puede atribuirse a una sola causa, sino que es el resultado de la interacción de múltiples factores. Subrayó que, aunque la decisión de suicidarse es individual, está profundamente influenciada por el entorno social y comunitario. «El suicidio es un fenómeno multicausal, influenciado por factores sociales y comunitarios, como el aislamiento, las desigualdades económicas y la falta de cohesión social», destacó.
El antropólogo señaló que en sociedades con altos niveles de desigualdad, los índices de suicidio suelen ser mayores. Explicó que la falta de apoyo comunitario, la discriminación, el aislamiento social y la falta de cohesión dentro de la sociedad son factores que pueden aumentar el riesgo de suicidio. «No es un problema meramente individual, sino que está impactado por factores sociales y comunitarios», afirmó, enfatizando que la solución no puede ser únicamente individual o clínica, sino que requiere un enfoque integral que incluya a toda la comunidad.
Ivanissevich también abordó la necesidad de que las políticas públicas se combinen con la participación activa de la comunidad. «Solo con políticas públicas no alcanza; si la comunidad no se apropia de las herramientas, la efectividad de las intervenciones no da resultado», señaló. Explicó que para que una intervención sea verdaderamente efectiva, debe involucrar a múltiples actores, trabajando en red, y adaptarse a las características y necesidades específicas de cada comunidad.
Además, destacó el papel preventivo de la cultura y el deporte, mencionando que estas actividades pueden descomprimir la carga emocional y promover la salud mental. «La cultura y el deporte salvan vidas porque previenen, descomprimen lo emocional y promueven la salud y la vida», afirmó, instando a la comunidad a valorar y fomentar estas prácticas como parte de la estrategia de prevención del suicidio.
Ivanissevich concluyó su exposición recordando la importancia de desestigmatizar los problemas de salud mental y de reconocer que todos, en algún momento, podemos necesitar ayuda. «Es indispensable la prevención y asistir a un profesional de salud mental», dijo, subrayando que la comunidad debe ser un espacio de apoyo y no de juicio para quienes atraviesan dificultades.
La psicóloga Grisel Fernández participó en la jornada de prevención del suicidio en Catriel, donde brindó una exposición detallada sobre los factores de riesgo asociados al suicidio, con un enfoque particular en la adolescencia. Fernández explicó que para prevenir el suicidio es fundamental comprender y reconocer los factores de riesgo antes de que se conviertan en una amenaza real.
Fernández destacó que la adolescencia es una etapa crítica en la vida, marcada por importantes cambios físicos, emocionales y sociales. Señaló que durante esta etapa, los adolescentes pueden experimentar síntomas como el aislamiento social, la falta de interés en actividades y cambios en la apariencia y la higiene personal. «El aislamiento social en la adolescencia es un alerta que debería preocupar, porque es una etapa donde buscan separarse de la figura de los padres y encontrar su propio camino», explicó.
La psicóloga también abordó la importancia de prestar atención a la comunicación virtual de los adolescentes, como las publicaciones en redes sociales, que pueden reflejar estados emocionales difíciles de verbalizar. Señaló que frases o música compartida en estos espacios pueden ser indicativos de un malestar subyacente que requiere atención. «Es importante prestar atención a lo que se publica y comparte», afirmó, subrayando que el lenguaje no verbal y las señales en la virtualidad son cruciales para entender lo que el adolescente no puede expresar con palabras.
Fernández explicó que otros factores de riesgo incluyen los trastornos psicopatológicos, como la depresión y la ansiedad, que, si no se tratan adecuadamente, pueden llevar a pensamientos suicidas. «Es indispensable la prevención y la intervención temprana, identificando a personas en riesgo y asegurando que reciban el tratamiento adecuado», enfatizó. Añadió que los antecedentes familiares de suicidio también son un factor importante a considerar, aunque aclaró que el pasado no determina el destino de una persona.
Además, Fernández habló sobre el impacto del contexto socioeconómico y ambiental en la salud mental. Explicó que situaciones como la pobreza, el desempleo y la falta de apoyo social pueden aumentar la vulnerabilidad de las personas al suicidio. «El contexto medioambiental y sociocultural también juega un papel clave en el riesgo de suicidio», afirmó, destacando que el apoyo social es fundamental para ayudar a las personas a superar situaciones adversas.
Fernández concluyó subrayando la importancia de pedir ayuda y de que la comunidad se convierta en un espacio de apoyo para quienes atraviesan momentos difíciles. «Primero, no se sale solo. Es importante pedir ayuda», dijo, animando a todos a estar atentos a las señales de alerta y a actuar con empatía y comprensión.